Finalizamos el mes de julio con una invitada que apuesta por la recuperación de cultivos en peligro de extinción.. ¡Bienvenida Ana!
Conociendo a Ca Climent
Me llamo Ana, periodista de formación, aprendiz de agricultora por devoción.
Actualmente, practico estas dos facetas convertidas en dos proyectos: barana.,
de comunicación y márketing con propósito; y Ca Climent, una peculiar manera
de recuperar cultivos en peligro de extinción.
Actualmente, practico estas dos facetas convertidas en dos proyectos: barana.,
de comunicación y márketing con propósito; y Ca Climent, una peculiar manera
de recuperar cultivos en peligro de extinción.
¿En qué consiste tu proyecto personal y qué quieres transmitir con él?
Ca Climent nace de mirar hacia dentro, del arraigo. Yo soy de pueblo, de campo… y aunque ahora vivo en la ciudad, hay algo que siempre me hace volver. Esta vez, la necesidad de rescatar un producto muy nuestro, el cacahuete y sus variedades tradicionales valencianas Collaret y Cacaua.
Con este proyecto quiero acercar al resto el legado que me transmite mi padre. Él es agricultor, el que me ha enseñado a proteger la tierra que nos sustenta, a valorar los productos con identidad, sabor (el de nuestros abuelos) y hechos desde la cercanía.
¿Cómo de importantes son tus manos en el proceso artesanal?
Las manos lo son todo. El cultivo del cacahuete es un trabajo muy poco mecanizado hasta la fecha. Se siembra manualmente, se extraen las matas una a una, s’espolsa también a mano para separar la mata de los cacahuetes… son procesos que requieren mucho tiempo y dedicación.
¿Lugar que te inspire para crear?
Me inspira l’andana, el lugar de la casa del pueblo donde viví hasta los 18 años
y donde generaciones anteriores de la familia Climent ya secaban los cacahuetes que cultivaban. Lleva intacto desde entonces, allí solo se escucha el canto de las golondrinas que anidan en el techo y las campanas de la Iglesia de fondo.
y donde generaciones anteriores de la familia Climent ya secaban los cacahuetes que cultivaban. Lleva intacto desde entonces, allí solo se escucha el canto de las golondrinas que anidan en el techo y las campanas de la Iglesia de fondo.
¿Qué crees que es el lo más importante que has aprendido en tus años de trabajo?
Pienso más en lo que me queda por aprender… Para mí la agricultura es uno de los oficios que más admiro y respeto. Se deben conocer todos los factores que influyen: agrometeorología, física, hidrología, ambientología, alimentación, etc.
He aprendido a empaparme de la sabiduría de las mujeres y hombres que se dedican al oficio y tomar el testigo de este conocimiento popular, sin dejar que
se pierda.
se pierda.
¿Cuáles son tus referentes artísticos?
Ricardo Cases (@ricardo_cases), me fascina cómo orienta la mirada a las expresiones del folclore contemporáneo, entre lo rural y lo popular.
Tiberi Club (@tiberi.club), la comida es (también) un asunto de juego. Crean
eventos, instalaciones y aventuras a través del acto de comer.
eventos, instalaciones y aventuras a través del acto de comer.
¿Cuenta de Instagram que más visitas?
@nowness, es ya como un hábito, como leer las noticias con el primer café del
día. Es un chute de inspiración y creatividad.
día. Es un chute de inspiración y creatividad.
¿Un libro que te haya inspirado?
Sensibilidad e inteligencia en el mundo vegetal, Stefano Mancuso.
Si queréis saber más acerca del trabajo de Ana:
https://www.instagram.com/cacliment/
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